Es fundamental que cuides de ti misma como persona, para que sigas expresándote libremente en internet.
El autocuidado es, según la definición de colectivas como Luchadoras: el conjunto de “acciones que podemos tomar de manera consciente para crear condiciones que nos permitan vivir con gozo y libertad. En el contexto de la libertad de expresión, son cuidados personales que le permiten a periodistas, escritores y activistas estar mejor física y emocionalmente”.
El mundo online y el mundo offline no están desconectados. Para que las personas se sientan seguras, deben tomar en cuenta los dos ámbitos, ya que las prácticas discriminatorias, sexistas o violentas se reproducen por igual dentro y fuera de la red, y pueden causar un fuerte desgaste emocional. Una quinta parte (20%) de las mujeres periodistas entrevistadas por la UNESCO para una encuesta mundial sobre el acoso en línea informaron haber enfrentado acoso y ataques en el mundo físico que, según creen, fueron provocados por violencia en internet. Según la UNESCO, “Cada vez hay más pruebas de que la violencia en línea contra las mujeres periodistas se traslada fuera de línea con un impacto significativo”.
Por ello, resulta esencial que las personas se cuiden a sí mismas antes, durante y después de un episodio de acoso en línea. Como mencionan especialistas de Social TIC, nunca olvides que:
- Si te acosan en internet no es tu culpa, no hiciste nada malo.
- No por ser ciberacoso es menos dañino o menos grave; es violencia y tiene efectos reales en tu vida emocional y física.
- La mayor parte de las mujeres que viven acoso en línea dejan de usar la tecnología. Según un estudio publicado en 2018 por la organización International Women’s Media Foundation (IWMF), un tercio de las mujeres periodistas consideran dejar la profesión debido al acoso en línea. Además, existe una brecha de digital de género, ya que las mujeres enfrentan mayores barreras para acceder y usar internet, de acuerdo con la World Wide Web Foundation. Eso es exactamente lo que buscan los acosadores. Pase lo que pase, recuerda que ese espacio también es tuyo.
Te recomendamos ver este video: 5 claves para evitar el acoso online.
Si conservas la intención de continuar generando textos y publicando, te vendrá bien echar un vistazo a estas recomendaciones de la psicóloga Lisa Feldman Barret:
- Lee y escribe. Para quienes escriben y hacen periodismo, esto parece una obviedad, pero leer y escribir contenidos distintos a los géneros que consumes o produces a diario, puede aliviar el estrés.
- Lleva un diario. Convierte el recuento de tu vivencia en internet en un camino para procesar el trauma y distanciarte de lo negativo de esa experiencia.
- Apaga tu teléfono en las noches. Silencia tu celular, échalo abajo de la cama, pon un temporizador y ponte a hacer otra cosa por un buen rato. Antes de acostarte deshabilita las notificaciones por completo para que puedas dormir sin interrupciones.
- Trata bien a tu cuerpo. Los masajes y la acupuntura ayudan a reducir el estrés relacionado con las emociones.
- Cuida tu nutrición. Comer bien significa tener suficiente energía para lidiar con una situación tensa, como es un episodio de acoso. Concéntrate en alimentos sanos, que te gusten y te mantengan hidratada. Prepárate algo especial, reconfortante. ¿Qué tal una bebida caliente? Té de hierbas, chocolate, ponche.
- No dejes tus prácticas espirituales, si las tienes. Podrías hallar equilibrio o refugio dentro de una comunidad de personas que piensan igual.
- Escucha música. La música modifica el estado de ánimo y ayuda a conectar con el resto del universo.
- Convive con un niño o una niña que amas, o con una mascota. Sus vidas son menos complicadas, el tiempo compartido con ellos constituye un respiro que te aparta de lo destructivo que estás enfrentando en tu vida.
- Toma el sol. La exposición a los rayos del sol está vinculada a un buen descanso por la noche. Intenta hacer caminatas en el campo, acercarte a la naturaleza.
- Muévete. Bailar, hacer yoga, mover el cuerpo viene muy bien si pasas mucho tiempo trabajando desde casa o en una redacción. Hay ejercicios específicos para conectar con tu cuerpo, calmar la mente y dar lugar a tus sensaciones físicas. A veces, algo tan simple como limpiar una recámara o hacer tu cama puede aliviar el estrés.
- Respira a conciencia. Respirar profundamente desacelera los latidos del corazón y estabiliza la presión arterial. Aquí puedes ver una lista de ejercicios de respiración.
- Medita. La meditación se ha practicado durante miles de años y por una buena razón: induce un estado de profunda relajación, alivia el estrés y la ansiedad. Para comenzar, prueba uno de estos cursos de meditación gratuitos:
Aquí, más sobre cuidados personales: sobrellevar y sanar.
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